Balcón Político: Tlahuelilpan y Tula, inseguridad sin freno

Por Carlos Camacho

Dos hechos nos vuelven a mostrar el aumento de la inseguridad en nuestra entidad, y en este caso, de manera concreta en el sur de la entidad: Tlahuelilpan y Tula de Allende, donde la gente clama por acciones concretas para frenar la ola de violencia que sufren los habitantes de esa región.

En el primer caso, son dramáticas y audaces las declaraciones de Rosendo Cruz Rufino ante sus vecinos de Tlahuelilpan, durante una reunión informativa, posterior a un encuentro con autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH), en respuesta a una petición anterior de que intervinieran para evitar que la zona “se convierta en un Sinaloa”.

Denuncia abiertamente a Lázaro Jiménez Flores, ligado al grupo delictivo “Los H”, que opera en la zona. El aludido es esposo de la presidenta municipal Norma Leticia Reyes Reyes.

Recuerda que el titular de la SSPH, Salvador Cruz Neri, le dijo vía telefónica, que andaba mal en sus números respecto de la cantidad de ilícitos cometidos en Tlahuelilpan. “Si, no son las cifras correctas… me quedé corto”, dice que le respondió cuando acordaron una reunión para hablar del tema de la inseguridad en la zona.

Dijo que los habitantes de Tlahuelilpan “vivimos en la oscuridad en seguridad. Ya estamos como Sinaloa o Zacatecas con tantos muertos, muertos y muertos.

Luego advierte:

“Si por esto que estoy diciendo, me mandan matar, adelante. Al fin que ya viví y tengo familia grande”, y sostiene que todo lo que dice y hace es porque “queremos ver un alto a la inseguridad que estamos viviendo”.

Luego, vuelve Tula de Allende a la escena, pues apenas ayer cuatro jóvenes de entre 24 y 35 años de edad -según el reporte policiaco- fueron asesinados por sujetos armados que llegaron a bordo de dos camionetas blancas, hasta un domicilio, ubicado en la calle Fresno, de la colonia San Lorenzo.

En el sitio quedaron cartuchos percutidos de armas calibre .9 milímetros y.223, de uso exclusivo del Ejército.

Tula se ha vuelto el sitio con mayor número de muertos, sea por disputas entre bandas delictivas o por el control de la plaza donde la venta de drogas y robo de hidrocarburo para su venta ilegal, son, entre otras, las actividades preponderantes en la zona.

Algo no funciona bien en nuestra sociedad y las autoridades encargadas de brindarnos seguridad han sido rebasadas, a pesar de los golpes que han dado a los delincuentes en diversos momentos. Nada frena a los grupos delictivos que hoy cometen un crimen aquí y mañana otro allá.

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