Balcón Político: Todo por cien mil pesos
- liliana820
- 21 oct
- 2 Min. de lectura
Por Carlos Camacho
Christian Martínez Reséndiz, mostró su vulgar ambición el domingo pasado, cuando pretendió extorsionar a los organizadores de la carrera atlética “Anillos del Poder”, en el municipio de Tula de Allende, con el pretexto de aplicar una multa sin dar argumentos válidos y como medida de presión, ordenó a sus policías impedir la salida de los vehículos del equipo que realizó la competencia.
Desde tiempo atrás se mostró renuente a facilitar la realización del evento, y tuvo que ser una colega suya del Valle de Tizayuca, quien intercedió para que el presidente de Tula accediera a regañadientes.
No apoyó en nada a los organizadores, quienes tuvieron que trazar la ruta de la carrera, llevar sus propias ambulancias y el apoyo logístico para los cerca de mil 200 asistentes. Se esperaban alrededor de tres mil, pero el municipio no apoyó en la difusión.
La prepotencia del munícipe llegó al límite el mismo día de la carrera, cuando observó que había un nutrido grupo de corredores y por eso intentó primero pedir un apoyo para el municipio por cien mil pesos y al reclamarle los organizadores por no haber apoyado, entonces cambió el apoyo por una multa, que debería ser entregada antes de iniciar la competencia; luego pidió que se entregara el dinero al finalizar el evento.
Como los organizadores se negaron, entonces ordenó cercar con policías los vehículos en que viajaban los promotores, para impedir su salida. Cuando una integrante del equipo organizador le entregó una playera del evento y le sugirió que él ofreciera un discurso y encabezara la salida, violentamente tiró la playera. Eso sí, cuando vio la cantidad de corredores, comenzó a tomarse fotografías (selfies) que de inmediato subió a sus redes sociales.
Más tarde pretendió utilizar el templete que montó el equipo organizador de la carrera, para la celebración del evento municipal del “Día Naranja”, lo que no fue permitido por los organizadores, quienes de inmediato desmontaron y salieron de prisa del lugar.
Tula se ha convertido en un municipio con mucha inseguridad y eventos como la carrera atlética, buscan cambiar el ánimo ciudadano, pero las autoridades municipales hacen todo lo posible por impedirlo o permitirlo a cambio de un “apoyo” económico que, obviamente, no iría a las arcas municipales sino a los bolsillos del presidente que con este tipo de actitudes le abona a su de por sí deteriorada imagen.
El problema es que no sólo daña su propia imagen, sino que empaña la del municipio que gobierna y la del partido que confió en él y lo impulsó para que llegara al poder. Ese partido es Morena.
Las opiniones expresadas en este espacio son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente representan la opinión de HGONLINE.









Comentarios