Balcón Político: Marco Rico, entre sus críticos y aduladores

Por Carlos Camacho 

Dicen que en política no hay casualidades, aunque en el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) las cosas a veces no ocurren así, por lo que habrá que tomar con serenidad la ausencia de, Marco Antonio Rico Mercado, presidente estatal de ese movimiento, en la reunión a la que vino el secretario de organización Andrés Manuel López Beltrán, para promover su campaña de credencialización con la que busca sumar a 10 millones de militantes en todo el país. 

El sábado 18 de enero, en el salón de eventos de un hotel de Pachuca, estuvieron reunidos el hijo del ex presidente de México, Andrés Manuel López Obrador y las coordinadoras, nacional y de circunscripción, del programa de credencialización de Morena, Mónica Marroquín y Estefanía Correa, respectivamente. 

No estuvo ningún representante del comité directivo estatal y esa fue una oportunidad que no dejaron pasar los malquerientes del ex perredista Marco Antonio Rico Mercado, quien en sus tiempos de militante del partido del sol azteca e integrante del Congreso Agrario Permanente (CAP), no desaprovechaba las oportunidades para despotricar en contra de López Obrador. 

Pero también fue oportunidad para que sus aduladores minimizaran el desdén del heredero político de AMLO, a quien en no pocos espacios de opinión se le coloca como puntero para suceder a Claudia Sheinbaum en el 2030. 

A Marco Rico, sus jilgueros le colocan como el artífice del abrumador triunfo de Morena en las elecciones concurrentes del 2024 y lo ubican como un líder político con capacidad para tejer fino, para evitar fracturas en la selección de los candidatos a los diferentes cargos de elección popular que se pusieron en juego el 2 de junio del 2024. 

En cambio, sus adversarios políticos, le acusan de vender candidaturas y le reclaman su imparcialidad a la hora de decidir candidaturas.

En Singuilucan, una aspirante a candidata a la alcaldía, lo acusó de pedirle dinero, a través de un tercero, a cambio de la candidatura y no le cumplió. 

Rico Mercado, pidió en su momento pruebas y acusaciones precisas, ante los tribunales correspondientes, porque de lo contrario se trataba de infundios.  

Pero, al final la mancha en su imagen de demócrata quedó y se aplicó la misma conseja que repetía AMLO en sus mañaneras, “la calumnia, cuando no mancha, tizna”. 

El dirigente de Morena, se sabe, no decidió candidaturas y menos manejó los recursos que se destinaron para las campañas.

Esas decisiones se tomaron en otra oficina, lejana a la sede estatal de Morena en la calle de Abasolo. 

Hoy, Marco Rico, vuelve a la escena y su ausencia en la reunión para coordinar las tareas de credencialización en el país y en Hidalgo, es pretexto para volver a criticarlo y adularlo al mismo tiempo, de acuerdo al lado en que cada cual se ubique. 

Las opiniones expresadas en este espacio son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente representan la opinión de HGONLINE.